El nuevo grupo dispondría del 33% de la potencia instalada por productores independientes, tras Iberdrola, que cuenta con el 37%. La potencia instalada por productores independientes en México alcanza el 22,9% de la potencia instalada total.
Según la española, la compra de Unión Fenosa supondría un avance significativo en su estrategia y permitirá crear un grupo empresarial español con capacidad de competir de forma eficiente en unos mercados energéticos sometidos a un proceso creciente de integración, globalización y aumento de la competencia.